Por: Jesús Miguel Castañeda Mayuri
El pasado 12 de febrero, tuvo lugar la sesión final de la segunda edición del European Citizens Panel de la Comisión Europea, dedicada al desperdicio de alimentos. Allí, 150 ciudadanos de los estados miembros de la UE presentaron sus recomendaciones para que Europa se enfrente a este problema. Fueron 23 sugerencias, que serán llevadas directamente a los políticos, quienes las tendrán en cuenta a la hora de legislar sobre la situación alimentaria europea. Las recomendaciones también servirán como guía para ayudar a los Estados miembros a alcanzar los objetivos de reducción del desperdicio de alimentos de la UE.
Los participantes fueron seleccionados al azar a partir de la diversidad de la UE -nación, urbano/rural, género, edad, origen socioeconómico y nivel de educación-. En cada panel, hubo al menos una mujer y un hombre ciudadano de un Estado Miembro; y un tercio de cada panel estuvo compuesto por jóvenes de 16 a 25 años. Desde finales del año pasado, estos se reunieron en tres sesiones, del 16 al 18 de diciembre de 2022 en Bruselas, del 20 al 22 de enero de 2023 en línea y finalmente en esta última en Bruselas del 10 al 12 de febrero de 2023.
Las recomendaciones finales giraron alrededor de 3 bloques temáticos: Cooperación en la cadena de valor alimentaria: de la granja a la mesa; Iniciativas de empresas alimentarias; y apoyar el cambio de comportamiento de los consumidores. El panel, por ejemplo, recomendó que los bancos de alimentos y los distribuidores reciban apoyo a través de un sistema estructural común en toda Europa, en lugar de trabajar mediante donaciones privadas. La necesidad de desarrollar un marco jurídico que armonice la legislación de los Estados Miembros sobre prácticas para toda la cadena de suministro en relación con la redistribución de los excedentes de alimentos también formó parte de las sugerencias. Así como la propuesta de una campaña europea contra el desperdicio de alimentos en cooperación con los minoristas del sector alimentario los cuatro fines de semana al año.
Pia Ahrenkilde Hansen, Directora General de Comunicación de Comisión Europea reflexionó sobre la importancia de un panel ciudadano que pueda a llegar a tener implicancias en la actuación de la UE sobre un tema tan urgente como los alimentos. “Estas 23 recomendaciones que los ciudadanos han puesto hoy sobre la mesa, se plasmarán en un informe directamente para los políticos. Los comisarios que van a hacer propuestas, y luego, por supuesto, todas las cartas coautoras de la Unión Europea tendrán igualmente la posibilidad de tener en cuenta estas recomendaciones de diferentes maneras. Se trata, por supuesto, de los políticos europeos, pero también de muchos actores del ecosistema alimentario que ahora también conocerán y estarán familiarizados con estas recomendaciones.”
El panel sobre desperdicio de alimentos atendió un tema latente para la Unión Europea. La UE generó 57 millones de toneladas de desperdicio de alimentos en 2020, por un valor de 130.000 millones de euros, y se identificó a los hogares como el mayor contribuyentes de estos residuos. Asimismo, según un estudio publicado en septiembre de 2022 por la organización ecologista Feedback EU, la UE desperdicia más alimentos de los que importa. En 2021 la UE importó casi 138 millones de toneladas de productos agrícolas por valor de 150 000 millones de euros.
En este contexto, una alianza internacional de 43 organizaciones de 20 países de la UE publicó una declaración conjunta en la que pide a la UE que introduzca objetivos jurídicamente vinculantes para que los Estados miembros reduzcan el desperdicio de alimentos en la UE de la granja a la mesa en un 50 % para 2030. Los signatarios incluyen Feedback EU, la Oficina Ambiental Europea y Zero Waste Europe, las empresas de desperdicio de alimentos Too Good to Go y OLIO, y miembros de la Plataforma de la UE sobre pérdida y desperdicio de alimentos, el organismo asesor oficial de la UE sobre desperdicio de alimentos. En 2015, los países de la UE se comprometieron a reducir a la mitad el desperdicio de alimentos para 2030, sin embargo, desde entonces no se ha avanzado lo suficiente. La Comisión tiene previsto adoptar la propuesta legislativa sobre este tema para junio de 2023, que luego de pasar por el Parlamento y el Consejo, podría ser adoptada como ley en 2026.
Sandra Gallina, Directora General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea, que participó como comisionada del programa, resaltó la necesidad de paneles de este tipo para poder llegar a los ciudadanos y darle mayor visibilidad a los esfuerzos que se realizan en Bruselas para poder atender los temas más importantes de la agenda social. “Hay una solución simple: implicar más el ciudadano y darle el poder el empowerment, que vaya a su país y decir miren «yo he hablado de esto, lo han aprobado y ahora lo tenemos que aplicar.»
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