En el marco del 36º Encuentro de la Economía Digital y las Telecomunicaciones organizado por AMETIC que tuvo lugar en la ciudad de Santander, Sustainability.es tuvo la oportunidad de conversar con Gema Igual, la alcaldesa de la capital cántabra. Ella nos dio más detalles sobre la importancia de este evento en la ciudad, los planes que tiene en terminos de industrias sostenibles y digitales, y lo que fue el proyecto Smart Santander.
¿Qué significa para Santander eventos como desarrolla AMETIC?
Tenemos que tener en cuenta que Santander es una ciudad de congresos. Una ciudad anfitriona. Cualquiera de los eventos que se celebran en la ciudad son importantes. Por la repercusión económica que traen, porque somos foco de conocimiento de encuentro y de debate. Así pues, un evento como el de AMETIC, que trata de empresas de nuevas tecnologías y de innovación es el futuro. El poder tener aquí a los mejores representantes de empresas, a los últimos avances en el mundo de la tecnología, y también a instituciones y a muchas de las personas que van a tener mucha relevancia en el futuro es impresionante. Tuvimos una inauguración con el gobierno central, con el gobierno autonómico, con el ayuntamiento de Santander, con las asociaciones empresariales más importantes del sector empresarial. La mejor muestra es cómo, en apenas una hora, la cantidad de gente que se congregó en el palacio de la Magdalena. También algo muy importante: nos da a nuestras empresas, a nuestro tejido empresarial de Santander, ese aval que necesitamos del sector a nivel global. En Santander tenemos empresas de innovación y de tecnología realmente importantes, punteras y con muchos profesionales.
¿Cómo está promoviendo Santander el despliegue y desarrollo de las industrias sostenibles y digitales?
Yo creo que el desarrollo de una ciudad tiene que ser de manera transversal. En una ciudad ya tenemos medido lo que se consume, se gasta y necesita. Eso ha pasado en nuestra ciudad porque Santander es Smart City desde antes del 2010; ahora el proyecto que tenemos a futuro es interrelacionar todos esos datos en el gran cerebro o en el gran repositorio de ciudad para ponerlos a disposición de esa gestión eficiente. Siempre digo que la ciudad inteligente es un término, pero lo que es realmente interesante es gestionar eficientemente e inteligentemente la ciudad. Eso va a hacer que, ahora con la crisis energética que tenemos, no sobredimensionemos ni por arriba ni por debajo la ciudad. Que realmente gastemos lo que la ciudad necesita. Que tengamos la previsión suficiente en una ciudad como Santander de conocer cuándo va a haber mayor o menor población, para también dimensionar los servicios dependiendo de la población que haya en nuestra ciudad. Debemos de tener en cuenta que en una ciudad de servicios como Santander, la predicción es realmente importante. También, concebir al ciudadano como “prosumidor”. Lo mismo produce datos que consume servicios. Ese círculo cerrado es lo que nos tiene que hacer avanzar como ciudad y eso es lo que tenemos que conseguir con la tecnología como institución. Después, con esa materia prima que tiene la ciudad, que son los datos, debemos ponerla a disposición de las empresas privadas. En Santander hay una empresa que tiene monitorizada la línea de autobuses municipales; la app de la empresa privada es mucho más visitada que la app del ayuntamiento. Eso nos gusta.
¿Cuáles son los principales desafíos de Santander para la gestión de los sistemas de financiamiento como los fondos europeos o los PERTES?
En este momento de crisis económica cualquier dinero que venga de fuera es bienvenido. Esta crisis económica después de una crisis sanitaria lo que ha hecho es cambiar la forma de gestionar, trabajar y proyectar el futuro. Y todos esos cambios, todos esos vértices, vienen ligados a la tecnología. Con lo cual, los fondos europeos que vienen son realmente importantes para dar esos saltos sin gastar de las arcas municipales porque la pandemia y la crisis económica han hecho que los ayuntamientos tengamos que hacer un sobreesfuerzo. Tenemos que gastar mucho más en energía y en las empresas de transporte. Y eso no ha venido acompañado de que el gobierno autonómico o el gobierno central nos ayuden. Vamos a seguir reclamando esa merma de recursos que hemos tenido, aunque por supuesto son bienvenidos los fondos europeos.
¿En su plan de desarrollo sostenible, como cree que se debe involucrar las patronales y los sectores productivos?
Las instituciones tenemos que ser el motor y el ejemplo. Los que levanten la mano primero para ese desarrollo, a ese cambio; se tiene que empezar por casa. El ayuntamiento cada vez que rehabilita o construye un edificio lo hace con eficiencia energética. Lo que deben de hacer las administraciones es promover, bonificar, incentivar y ayudar. Debemos de premiar con ayudas (directas o con bonificaciones) en las tasas y en los impuestos a quien también, de manera eficiente, tenga la co-responsabilidad medioambiental que se necesita.
¿De qué manera el ayuntamiento ha desarrollado un sistema de gestión digital y sostenible que apoye el desarrollo de la industria 4.0 dentro del ayuntamiento?
Porque llevamos mucho tiempo trabajando. El proyecto de Smart Santander nace en el año 2007-2008 y empieza fortalecido por la unión del Gobierno de Cantabria, el Ayuntamiento de Santander y la Universidad de Cantabria. Nace porque nos presentamos a ser laboratorio urbano. Tenemos alianzas con más de 300 países de todo el mundo y hemos formado parte de 200 proyectos europeos. Muchos han quedado para la ciudad y otros no. Era un laboratorio que hacíamos en el marco de la UE. Con esa implicación en la tecnología, ha habido muchas empresas que también se han beneficiado de este dinero cada vez que hacíamos una open call. Con lo cual, la administración empezó a avanzar, por un lado con esos proyectos europeos y por otro lado con modernizar el ayuntamiento. Con lo cual, a día de hoy, la gestión digital de la ciudad está ya monitorizada en sus diferentes verticales; y ahora debemos de interrelacionarlas para que cada vez sea más autónomo el funcionamiento de la ciudad. Yo quiero llegar al punto en el que, cuando haya una tubería que se estropee y el agua invada la calzada, inmediatamente los semáforos se pongan en rojo, la línea de autobús cambie de recorrido, porque se sabe que por ahí no puede pasar. Que se mande también un mensaje a los vecinos de la zona si se les ha cortado el agua, y si es de noche la iluminación aumente de intensidad para no meter el pie en el agua. Eso es a lo que queremos llegar. Yo creo que con los cambios tan continuos que tiene la tecnología, debemos de tener muy claro lo que queremos, debemos primero medirlo y luego debemos de relacionarlo. Tampoco un ayuntamiento, que es servicio público y de atención al ciudadano, puede prescindir del humano ni muchísimo menos basarse solo en la tecnología. Pero creo que ahora ya estamos en un momento en el que la tecnología tiene mucho que ver con la gestión.
¿Qué tipo de soporte necesita Santander por parte de la comunidad autónoma y el gobierno central en lo que a digitalización y sostenibilidad se refiere?
Pues necesitamos recursos, que es lo que nos hace falta. También, que respeten nuestra independencia. Recursos porque también somos españoles, somos santanderinos, somos cántabros; con lo cual el gobierno de España tiene una corresponsabilidad en todo el territorio, en un momento en el que, vuelvo a decir, los recursos municipales se han visto muy mermados por falta de apoyo del gobierno central. En la tecnología, yo creo que nos deben de dar fondos y nos deben de dejar independencia. Y sobre todo, nos deben de dar el amparo y el marco legal de tramitación y celeridad para que podamos después nosotros desarrollarlo. Esas ayudas deben venir seguidas de normativas. Ahora tenemos muchas amenazas cuando ponemos cámaras en la calle; por temas como la ciberseguridad, los patrones de comportamiento y la identificación personal. Todo eso necesita un marco normativo facilitador, celeridad en los trámites y ayudas económicas.
¿Cómo lleva el reto de fomento de nuevos empleos en el marco de la reindustrialización digital y sostenibilidad? ¿Qué necesita el Ayuntamiento para poder promover más empleo?
Los puestos de trabajo son algo que preocupa a todas las entidades locales. Queremos que nuestros ciudadanos tengan trabajo, porque el trabajo además de ser necesario dignifica la independencia y es muchas veces pues el punto de partida para formar una familia o para tener un proyecto de vida. Efectivamente, en el sector de las nuevas tecnologías en Santander no hay paro, porque el talento a veces se va. Tenemos una escuela de telecomunicaciones maravillosa, el talento a veces se va o quienes se quedan pues tienen trabajo. Pero debemos de también enfocarnos en esas otras profesiones que están en decadencia, que a lo mejor ya no se van a poder dedicar a esa profesión, o esa profesión que no asume tantos profesionales y deben de reciclarse hacia las TIC. Eso nos preocupa a nosotros. Con la asociación local de Santander de empresas de nuevas tecnologías hacemos cursos ad-hoc para grupos de 20 o 30 personas. Y con AMETIC hacemos esos cursos de formación para que después tengan trabajo. Además, estamos ahora construyendo un centro de empresas que va a tener base tecnológica en donde también las asociaciones empresariales del sector tecnológico y la asociación de jóvenes empresarios, de mujeres empresarias van a unirse en torno a este sector porque entendemos que es el futuro. Si hay algo que tiene 0 paro, si hay algo que tiene demanda de profesionales y nosotros tenemos una bolsa de desempleados debemos de reconvertirles, debemos de crear un ecosistema. Y a veces, no siempre, y con respeto por supuesto a la formación y a la gente que sale de nuestra escuela, a veces otras ingenierías pueden tener también cabida en el sector de las nuevas tecnologías. O a veces otros perfiles profesionales puede ser fácil que se reconduzcan. Esa es la formación que queremos dar.
¿Qué otro tipo de eventos académicos y corporativos se vienen para Santander?
Santander se interesa por el turismo en todas sus vertientes. El turismo en nuestra ciudad es multisectorial: turismo de congresos, turismo de sol y playa, turismo familiar, cultural -que cada vez está tomando más auge- y turismo medioambiental. Estamos a punto de ser reconocidos por la UNESCO como geoparque por la senda litoral norte. Pero el turismo de congresos sí es realmente importante. Durante la época de verano tenemos desde el 15 de junio y hasta el 30 de septiembre los cursos de la universidad internacional Menéndez Pelayo que nos traen muchos cursos, una semana con premios nobel y un elenco maravilloso de ponentes. A lo largo del año, Santander está posicionado como destino de congresos. Tenemos sedes como el Palacio de la Madalena que es incalculable el valor que tiene, el Palacio de exposiciones y el Palacio de festivales. Los hoteles, el sector médico/sanitario son quienes más generan eventos en nuestra ciudad. El turismo de eventos, de convenciones y de reuniones realmente es muy rentable para la ciudad por varios motivos. El impacto económico de un congresista son 200 y pico euros al día por el volumen de empresas a quién afecta (desde taxis, empresas de transporte, de imagen, de sonido, de azafatas, de diseño gráfico, traducción) y por el posicionamiento que nos da. No nos olvidemos que la marca Santander cada vez que viene un congresista a nuestra ciudad, cada vez que hay una publicación de un congreso en nuestra ciudad o de una ponencia, se engrandece. Hace muchos años hicimos un estudio para valorar cuántos congresistas que venían a la ciudad declaraban la intención de volver: 8 de cada 10 tenían tal nivel de satisfacción con la ciudad como para declarar que iban a venir con amigos o familiares. Con lo cual el turismo de congresos es incalculable en esta ciudad. Vamos a seguir trabajando y generando infraestructuras y el ecosistema necesario para que cada vez sean más las personas las que vengan; porque la cita puede ser para un evento profesional, pero la ciudad enamora.
¿Cuál sería su mensaje final para el sector corporativo, la ciudadanía en general y el gobierno?
Santander es una ciudad maravillosa. Siempre digo que lo mejor que tiene son los santanderinos, porque son buenos anfitriones y además saben hacer sentir bien a quien viene a trabajar. Necesitamos atraer talento de fuera, el teletrabajo en Santander está cada vez cogiendo más auge. Para quien viene a vivir, somos una ciudad segura con una calidad de vida muy alta: es una ciudad muy manejable en donde ni hay atascos, ni hace mucho frío, ni hace mucho calor, y en donde el ocio y la cultura impregnan la vida. Es una ciudad en la que puedes disfrutar de ocio y de cultura todos los días del año. En grandes ciudades, de lunes a viernes la gente tiene menos opción, por los traslados, por el ritmo de trabajo y por el ritmo de la ciudad, de disfrutar de cultura y ocio. Y en Santander se puede disfrutar de naturaleza, de cultura y de ocio todos los días del año. Yo creo que eso es importante. Y cuando se viene para celebrar un congreso, el coste es mucho más asequible por el precio medio de los hoteles y las cenas. Con lo cual, creo que somos una ciudad muy competitiva. Somos la ciudad perfecta para trabajar, para vivir, para disfrutar y para hacer congresos.
Comments are closed