Traducción de artículo publicado en Reuters por Sergio Goncalves
LISBOA – Portugal ha más que duplicado sus objetivos para 2030 en cuanto a capacidad instalada de energía solar y electrolizadores para producir hidrógeno verde, ya que apunta a desmantelar centrales eléctricas de gas natural para 2040 y posiblemente convertirse en carbono neutral para 2045.
Los nuevos objetivos son parte de un borrador actualizado de los objetivos de energía y clima que Portugal envió a Bruselas el viernes, la fecha límite para que todos los países europeos presenten planes renovados sobre cómo esperan ayudar a promover los objetivos de energía renovable de la UE. Seguirá una audiencia pública y el plan final se entregará en junio del próximo año.
Portugal ahora tiene como objetivo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 55% para 2030 desde los niveles de 2005, mientras que su plan anterior preveía un recorte del 45% al 55%. También está estudiando la posibilidad de convertirse en carbono neutral cinco años antes de su compromiso original.
El gobierno pronostica que la capacidad total instalada de energía renovable aumentará a 42,8 gigavatios (GW) para 2030, por encima del objetivo de 27,4 GW en el plan anterior, y 2,5 veces más que la capacidad en operación el año pasado.
Eso requerirá una inversión estimada de 75.000 millones de euros (81.800 millones de dólares) en proyectos de energía verde, en su mayoría privados.
La UE corre el riesgo de no cumplir sus objetivos de cambio climático para 2030, debido a la incertidumbre sobre si se están invirtiendo suficientes fondos en la transición baja en carbono, dijo el Tribunal de Cuentas Europeo (TCE) en un informe el mes pasado.
Portugal tiene como objetivo generar el 85 % de su uso anual de electricidad a partir de fuentes renovables para 2030, frente al 60 % en 2022, que ya era uno de los índices más altos de Europa.
Se espera que la capacidad solar alcance los 21 GW en 2030, frente a los 9,3 GW del plan anterior y ocho veces por encima del nivel del año pasado.
La nueva capacidad de electrolizadores para producir hidrógeno verde debería alcanzar los 5,5 GW para 2030, frente a los 2,5 GW pronosticados anteriormente.
El gobierno elevó el objetivo de energía eólica terrestre a 10,4 GW desde los 9 GW pronosticados anteriormente, al tiempo que fijó la capacidad que se ofrece en la primera subasta de energía eólica marina a finales de este año en 2 GW.
El impulso de las energías renovables permitirá reducir la capacidad de las centrales eléctricas de gas natural a 3,8 GW en 2030 desde los 5 GW actuales, «avanzando hacia su prohibición a partir de 2040, siempre que se garantice la seguridad del suministro», dijo.
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