Traducción de artículo publicado en Reuters
SANTIAGO, 6 mayo (Reuters) – Un amplio conjunto de propuestas ambientales podría remodelar los derechos mineros en Chile, el principal país del mundo productor de cobre, si lo aprueba la asamblea constituyente del país el sábado.
Esta es la segunda vez que se vota en la asamblea general el ambicioso conjunto de propuestas que buscan consagrar los derechos ambientales en la nueva constitución, luego de ser rechazado a fines de abril.
Las nuevas propuestas aún amplían las tierras protegidas, el agua, los glaciares y los recursos naturales, pero suavizan parte del lenguaje de la propuesta anterior, mientras que se mantienen los artículos que amplían el control gubernamental en las actividades mineras en todo el país.
El artículo 27 otorgaría al estado derechos exclusivos sobre el litio, los metales de tierras raras y los hidrocarburos, al mismo tiempo que convertiría al estado en accionista mayoritario de cualquier mina de cobre.
Una enmienda propuesta reduciría la participación estatal a por lo menos un tercio.
La industria minera del país ha expresado su desaprobación de las propuestas.
Un grupo de pequeños mineros con cascos y banderas chilenas protestaron frente al edificio de la asamblea el viernes, mientras que la Sociedad Nacional de Minería de Chile (Sonami) emitió un comunicado en contra de las propuestas.
«Hemos percibido, en diferentes reuniones con nuestros miembros, una profunda preocupación en el sector sobre el futuro de la minería chilena a la luz de estos (artículos propuestos)», dijo el presidente de Sonami, Diego Hernández.
El paquete completo de propuestas necesita una mayoría de dos tercios para ser aprobado. Si se rechaza nuevamente, los artículos no se incluirán en el proyecto de constitución.
Si se aprueba el paquete, cada artículo se votará individualmente. Los artículos que alcancen una mayoría de dos tercios se incluirán en el proyecto de constitución, mientras que los que obtengan menos, pero más de una cuarta parte, se devolverán a la comisión.
El borrador completo debe presentarse a principios de julio y los ciudadanos votarán para aprobar o rechazar la nueva constitución el 4 de septiembre.
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